RedIRIS ha lanzado la segunda fase del servicio unificado de filtrado antispam (Lavadora) para reducir el correo basura
El servicio unificado de filtrado antispam, denominado coloquialmente “Servicio Lavadora”, fue evaluado y diseñado en 2009 para reducir costes en los servidores perimetrales de correo. En 2010 comenzó a instalarse la Plataforma Unifica de Correo (PUC) que en octubre de 2010 y con 10 instituciones interesadas permitió poner en producción la Fase I del servicio. A mediados del 2011 y con el despliegue de RedIRIS-NOVA comenzó la Fase II instalándose un segundo nodo (5 servidores) de PUC en el cpd del CIEMAT. A través de RedIRIS-NOVA se procedió a la configuración de un canal óptico entre ambos cpds (telvent-ciemat) para poner en producción una plataforma con cpds en modo activo-activo. Toda esta operativa de ampliación se realizó sin interrupción del servicio y ha permitido mejorar notablemente la calidad del servicio inicial aumentando la capacidad de procesamiento y almacenamiento para cuarentena y colas de correo. Este sistema también permite máxima disponibilidad ya que en caso de problemas en uno de los cpds el servicio continuará con los recursos del otro cpd.
- A esta notable mejora de ampliación de la Plataforma, se han añadido nuevas funcionalidades al Servicio de Lavadora, entre las más significativas:
- Incorporación de la tecnología de Commtouch para mejorar la eficiencia en la detección de spam, virus, phishig y malware
- Compatibilidad con IPv6 en el protocolo SMTP permitiendo protección contra posibles amenazas y problemas de seguridad en las transacciones IPv6
- Nuevo sistema de estadísticas e informes a medida
- Posibilidad de hacer búsquedas en las transacciones SMTP de conexión
- Disponibilidad de cuarentena para usuarios
- Posibilidad de utilizar el producto Cloud Email Archiving de Spamina
Actualmente el servicio Lavadora se ofrece a 61 instituciones con 500 dominios, protegiendo el correo de 400.000 usuarios. Se procesa una media mensual de 400 millones de piezas de correo que se analizan y clasifican como spam, virus o validos, entregándose a la institución o almacenándolos en cuarentena.
