La primera vez que se hace algo, siempre hay incertidumbre sobre cómo saldrán las cosas. De repente tenía ante mí tres “primeras veces”: primer viaje de trabajo en 20 meses; primera visita a Murcia; y primera asistencia presencial a unas Jornadas de CRUE-TIC.
Las incertidumbres no podrían haberse resuelto de forma más favorable: fue un placer volver a estar físicamente rodeado de tantos colegas tan valiosos profesional y humanamente; Murcia nos recibió con un tiempo magnífico, y con su gran riqueza arquitectónica y gastronómica; y las Jornadas de CRUE-TIC me parecieron muy interesantes y oportunas en esta fase de cambio tecnológico y social acelerado, en la que resulta particularmente necesario abrir vías de colaboración para afrontar de forma eficiente los numerosos retos que se nos plantean.
La colaboración es un valor fundamental en nuestro ámbito: “Si quieres ir rápido, ve solo, pero si quieres ir lejos, ve acompañado”. Y sobre colaboración trató mi ponencia en esas Jornadas de CRUE-TIC, en concreto, la que hace falta para implementar el modelo de ciencia abierta europea en la nube (“European Open Science Cloud”, EOSC).
En nuestro sistema económico y social, son fundamentales los datos, para obtener información, que genere conocimiento. Las principales empresas en esa Economía del Conocimiento son americanas y asiáticas, pero el entorno científico y académico europeo genera una gran cantidad de datos (muchos de ellos, financiados con fondos públicos) potencialmente muy valiosos. Sin embargo, esos datos no tienen formatos comunes que garanticen su interoperabilidad y uso compartido, ni están almacenados de forma que sean accesibles a terceros. El EOSC intenta dar solución a esos problemas, creando un entorno en el que el todo sea más que la mera suma de las partes.
El EOSC supone pues una gran oportunidad, ya que, con la necesaria coordinación, se sacaría mucho más partido a todos los datos científicos europeos. El EOSC es también un gran reto, porque no es una tarea sencilla llegar a acuerdos sobre estándares armonizados para al menos los 27 países de la Unión Europea, y para los cientos de comunidades científicas distintas que existen en ellos, teniendo además que procederse después a la implementación efectiva de los estándares acordados.
Son muchos los factores que influyen en la implementación de ese modelo, y entre ellos se encuentran disponer de redes de comunicación que permitan mover grandes cantidades de datos; y disponer también de servicios cloud adecuados, con sistemas de identidad digital que permitan acceder, de forma sencilla y segura, a múltiples bases de datos interoperables, incluso en entornos multidisciplinares.
RedIRIS, como otras redes académicas y científicas, está muy comprometida en colaborar todo lo posible para hacer realidad esa visión compartida del EOSC. Para ello ponemos a disposición de nuestras instituciones afiliadas una serie de servicios TIC comunes relevantes en ese entorno, y también contribuimos al impulso de la e-Ciencia en España (como uno de los fundadores de la Red Española de e-Ciencia) y en Europa, como miembros de la EOSC Association, y como participantes en uno de sus grupos de trabajo, en concreto, el de Sostenibilidad Financiera. En este ámbito, como en otros, el problema no es solo tecnológico, es también económico y cultural, y, por tanto, político. Solo con los recursos, apoyos e incentivos necesarios se podrá sacar adelante con éxito este gran reto que se nos plantea.
Reto que no es desde luego el único. La pandemia va remitiendo, pero no ha desaparecido aún, y sigue teniendo un alto impacto sanitario, social y económico. Para paliar ese impacto, una de las medidas adoptadas por la Unión Europea ha sido poner en marcha el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, con unos 70.000 M€ de ayudas para España, de las que 20.000 M€ se destinarán al sector TIC. De ahí salen 50 M€ asignados a UNI-DIGITAL RedIRIS.
De esa cantidad, 31,5 M€ corresponden a UNI-DIGITAL RedIRIS Infraestructuras Digitales, actuación a través de la cual se llevarán a cabo extensiones de fibra óptica y adquisición de equipamiento de red para 16 instituciones académicas y científicas (7 de ellas redes académicas y científicas autonómicas).
Ya se han firmado y publicado en el BOE los convenios con esas instituciones afiliadas, y ahora nos corresponde la ardua tarea de tramitar más de 30 licitaciones para ejecutar esos convenios, eso sí, con la satisfacción de que para RedIRIS será un gran logro proporcionar a esas instituciones unas infraestructuras de red de última generación, tras haberles conseguido además los fondos europeos con los que se financian en su totalidad esos despliegues.
Por otro lado, hay otros 18,5 M€, para la actuación UNI-DIGITAL RedIRIS Servicios TIC comunes. Se está procediendo a la firma de un Convenio con el Ministerio de Universidades para constituir una comisión conjunta que, con la colaboración de CRUE-TIC, determine cuáles serán los nuevos servicios TIC comunes que se pongan en marcha. Entre los posibles ámbitos de actuación se contemplan la ciberseguridad (empezando con un servicio de DNS Firewall en cuya puesta en marcha ya se trabaja), la identidad digital, la e-administración, el cloud, las herramientas colaborativas… Esta iniciativa, a ejecutar por RedIRIS, se plantea como complementaria a los proyectos colaborativos que, dentro de otra línea de actividad del Plan UNI-DIGITAL, están proponiendo las universidades españolas.
Otro notable esfuerzo colaborativo está permitiendo completar, con la ayuda de las instituciones afectadas, la migración de los equipos ópticos y los equipos IP, gracias a los cuales los enlaces de 10 Gbps pasan a ser de 100 Gbps, multiplicándose así por 10 la capacidad de transmisión de datos de la red troncal de RedIRIS.
Colaboración, cooperación… El mito del baloncesto Michael Jordan decía que el talento ganaba partidos, pero que era el trabajo en equipo el que conseguía los campeonatos. Para nosotros es una gran motivación el cooperar con gran número de organismos que aportan mucho valor y con los que intentamos conseguir objetivos comunes de interés general. Con esa ilusión y con esa fuerza colectiva afrontamos los retos que nos esperan en 2022, no sin antes desearos a todos unas Felices Fiestas.